
En asuntos de formación entiendo que nadie queda exento de aprender, compartir y mejorar. Esa secuencia, además, debería permitir que nuestra labor como profesionales de franquicia sea cada vez más eficiente y de calidad.
De la interesante sesión inaugural de la escuela el próximo día 7 se puede deducir que se ha planteado como una actividad formativa, no como una presentación, y que para llevarla a cabo se ha escogido, con total independencia, a un formador de reconocida experiencia y trayectoria.
Así pues y afortunadamente, la Escuela de Franquicia nace como una plataforma formativa ambiciosa, plural y profesional, en la que cada cual hace el papel para el que está preparado. Toulouse Business School opera la escuela, la AEF la avala y el profesorado forma.